Nuestra vida está repleta de actos banales en los que ya
apenas reparamos. Sacamos la llave, la introducimos en la cerradura y la puerta
se abre. Forma parte de una lógica que apenas nos molestamos en interpretar.
Sin embargo, muchos de los actos más mundanos se convierten
en acontecimientos cuando descubrimos cómo se llevan a cabo. Ya verás…
Aquí tienes un microchip visto con un aumento de 10x.
Lo que se produce antes de un rayo.
La luz no puede golpear dos veces en el mismo sitio, pero tú
si puedes ver hasta la extenuación esta ráfaga a cámara lenta una y otra vez.
Así se abre la puerta de casa, uno de los mejores momentos
del día.
Estos rayos X muestran lo que verías si
tuvieras literalmente un ojo en la mente.
Lo que permite que
vivan los mosquitos.
Este primer plano demuestra que los mosquitos tienen corazón. Si tienen alma es otro
debate que no abriremos aquí.
… Parece el nacimiento de un
extraterrestre, ¿o no?
Lo que permite
levantarte.
Estas moléculas de cristal microscópicas de la cafeína es lo que ayuda a
comenzar las mañanas.
He aquí la resonancia magnética de un
pedazo de broccoli.
Una gota de agua.
De lo más grande a lo más pequeño.
Un hombre perdiendo
su dignidad.
Y nunca fue tan fascinante.
La fracción más
pequeña de una tormenta de nieve.
Un copo de nieve visto de cerca. Si lo
miras muy fijamente se puede derretir.
Una copa hecha añicos.
La clave de tus pantalones.
Algo tan habitual como subirte la cremallera de los pantalones representa una acto de máxima precisión.
Riña de gatos
Son lindos, pero cuando se enfadan dan miedo. Y vuelan.
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